domingo, 24 de febrero de 2019

La solidaridad es una reacción espontánea de quien reconoce la función social de la propiedad y el destino universal de los bienes como realidades anteriores a la propiedad privada.
La posesión privada de los bienes se justifica para cuidarlos y acrecentarlos de manera que sirvan mejor al bien común.
La solidaridad debe vivirse como decisión de devolverle al pobre lo que le corresponde

El Papa Francisco

No hay comentarios:

Publicar un comentario