miércoles, 17 de junio de 2015

Seguid en la oración el atractivo
que el Señor inspire a vuestro corazón,
y sea la contemplación de los dolores de Jesucristo
ya sea los encantos del paraíso;
en eso no hay engaño posible.

San Claudio de la Colomberíere

No hay comentarios:

Publicar un comentario